Nota estatal: Elementos del Ejército mexicano y de la Marina Armada, de manera conjunta con autoridades estatales, reforzaron la seguridad en los cinco complejos petroquímicos asentados en Veracruz, así como en la refinería de Minatitlán y en la nucleoléctrica Laguna Verde.
El subsecretario de Protección Civil del Gobierno de Veracruz, informó que luego de las amenazas a México por parte de la organización terrorista Al Qaeda, se reforzaron las medidas de seguridad en todas las instalaciones petroleras estratégicas de Veracruz. "En lo que el Gobierno federal gira instrucciones ya se mantiene vigilancia y sistemas de seguridad al exterior de las instalaciones de Pemex, en el interior la propia paraestatal tiene sus sistemas", explicó.
El reforzamiento de la vigilancia incluyó a 140 -de los 212- municipios de Veracruz por donde pasan ductos de la paraestatal Pemex que transportan petróleo crudo, gas natural, amargo o dulce, gasolinas, diesel y otros productos refinados.
La vigilancia incluye el Complejo Petroquímico Escolin, el Complejo Procesador de Gas y la Terminal de Cobos, todos ellos asentados en la zona norte de Veracruz. Así como los Complejos Petroquímicos de Cosoleacaque, Pajaritos y Morelos, asentados en la región sur de la entidad, donde también se asienta la refinería Lázaro Cárdenas de Minatitlán, una de las más importantes de Latinoamérica.
En estas instalaciones terrestres fueron los elementos del Ejército, quienes reforzaron la seguridad; mientras que marinos de la Armada de México hicieron lo propio en la nucleoléctrica Laguna Verde, la única en México.
Y es que la red terrorista internacional Al Qaeda instó a sus seguidores a atacar las instalaciones petroleras de los países que suministran crudo a los Estados Unidos, entre los que citó a México, Venezuela y Canadá. El gobierno estatal informó que las autoridades estatales y federales mantendrán una vigilancia permanente en las instalaciones de Pemex ubicadas en el territorio estatal, aunque dijo que México es un país pacífico.
Sin embargo, una realidad inegable es que las instalaciones petroleras de México son un blanco muy fácil para el terrorismo internacional, y que las corporaciones nacionales de seguridad no tienen la suficiente capacitación, ni planes preventivos adecuados para evitar un ataque del terrorismo de alto perfil.
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