Post de Alto mando. La comidilla en los periódicos locales de la zona sur es la reaparición en la vida pública de la licenciada Juana Isabel Morales Aguirre, prófuga hasta ayer por su presunta participación en el cruel asesinato de su esposo, Javier Gómez Gutiérrez, mejor conocido como “El Potro” quien causo gran polémica por manejar a su antojo las licitaciones de obra pública en la petrolera ciudad de Minatitlán. Morales Aguirre se dejo ver ayer desayunando en el Restaurante Vips con su hijo.
Comentaristas del sur aseguran que ciudadanía de Minatitlán, se pregunta indignada el curso que ha tomado el escabroso caso de la ex síndica municipal conocida como “La Potra”, que después de internarse en un sanatorio por una herida de bala recibida -supuestamente de parte de su propio y difunto esposo- escapo ante la mirada de decenas de policías municipales y agentes ministeriales que “cercaban” de la Clínica Humana, anduvo a salto de mata por los alrededores de Minatitlán durante un año, en donde aseguran sus malquerientes se reunía discretamente con un grupo de regidores y el cacique local, del que se sabe su extinto marido era prestanombre y hoy aparece tomando cafecito muy tranquila en un conocido restaurante del poniente de esa ciudad.
Se sabe que el primer Tribunal Colegiado con sede en Villahermosa, institución de gran prestigio y fama de incorruptible, decidió otorgar un segundo amparo federal en contra de la orden de aprehensión emitida en su contra por el Juez Primero de Primera Instancia, que la considera aun probable responsable de homicidio doloso. Nadie en Veracruz piensa que le hayan llegado al precio a ese juez, pero en Minatitlán corren los rumores de que la mano que mece la cuna es ni más ni menos que su compadre y protector Pablo Pavón Vinales.
Los columnistas sureños comentan incrédulos que; para que el tribunal colegiado otorgara el amparo, la averiguación previa tenía que estar más que mal integrada, fortaleciendose la versión que “La Tablita” Pavón metio las manos para favorecer a como diera lugar a “La Potra”, sin importar formas.
Se dice también en Minatitlán que el asesinato del “Potro”, tuvo repercusión importante para que Jorge Wade perdiera la elección a la diputación federal, ante el repudio cada vez más generalizado de la ciudadanía por los desmanes de la “potra y el potro” y su compadre, protector y socio, el ex diputado federal y manda mas de la sección 10 de petroleros Pablo Pavón Vinales, agregando que por alla es de todos conocidos las mil y una tropelías que se iniciaron en 1997, cuando “La Tablita”, como todopoderoso líder petrolero, perdió la presidencia municipal ante el perredista Amado Guzmán García.
Comentan en los periodicos del lugar que el entendimiento de “La Tablita” con “El Potro” y “La Potra” generó un gran enriquecimiento gracias a la compra de edificios y hoteles en el centro de la ciudad, cuentas en diversos bancos, diversos ranchos, ganado de registro, caballos pura sangre, venta de contratos del municipio y una red mafiosa manejada por sindica con todo el poder que le dio su compadre Pavón Vinales, que solo sirvió a para que “la Potra” ambiciosa hiciera de las suyas, humillando al propio presidente municipal Raúl Morales Cadena, al ceder toda la obra pública su marido “El Potro” que desestabilizó las arcas municipales y para que finalmente se desintegrara toda la familia ante el escándalo que no se pudo ocultar.
Se dice que ahora “La Potra” inicia una campaña para “sanear su imagen” y mediante sus dos periodistas a sueldo, inicia una precampaña para buscar el fuero mediante la diputación local por el PRI “pero hasta que se reponga de salud”. Esta campaña inicio con la difusión de fotografias recientes en una disco de su ex desaparecida hija –la cual abandono repentinamente la dirigente del Frente Juvenil Revolucionario del PRI- en las paginas sociales del periodico de mayor circulación por esos lares, como diciendo ¡aquí estoy y que¡
Recordemos que el Procurador General de Justicia Emeterio López Márquez, señaló que las pruebas periciales indican la responsabilidad de la síndica de Minatitlán Isabel Morales Aguirre, y su hermana Carolina, en el homicidio del ganadero Javier Gómez Aguirre, esposo de la edil, que no ha sido detenida ni arraigada pero se tiene bien ubicada por la policía ministerial.
En conferencia de prensa el Fiscal del Estado acompañado por el titular de la Policía Ministerial del Estado, José Gabriel Pérez Gutiérrez, informó que las pruebas periciales practicadas en el homicidio del ganadero Javier Gómez Aguirre, dieron como resultado la presunta responsabilidad por homicidio calificado de la síndica de Minatitlán Isabel Morales Aguirre, y su hermana Carolina, ahora libre "por falta de pruebas".
El procurador veracruzano precisó que los resultados de balística y radiosonato que se practicaron a las hermanas se determinó la probable responsabilidad de la síndica y su hermana, ya que con estas pruebas se puede saber la dirección de los proyectiles en los puntos de entrada al cuerpo del ganadero asesinado.
Ayer el subprocurador de justicia en la zona sur, Tomas Cristóbal, apareció en los medios diciendo que para las autoridades judiciales del estado de Veracruz, la orden de aprehensión persiste y el amparo puede ser apelado en cualquier momento, por lo que es importante ver que ahora que si se tiene ubicada a la indiciada la PGJ veracruzana podrá cumplir con su cometido.
Un reconocido comentarista político a nivel estatal menciona en una de sus columnas, que lo más penoso y criminal para la justicia de Veracruz, es que el subprocurador Tomás Cristóbal Cruz, compadre de los Gutiérrez Morales, se dijo engañado y dejó que huyera la síndica de la clínica donde estaba internada, mencionando que el funcionario judicial creia que porque ser hijo del dirigente nacional de la Central Campesina Independiente, Juan Cristóbal Céspedes, amigo del Gobernador, podría salvar su notoria participación en el encubrimiento del crimen de Javier Gómez Gutiérrez, pero que se equivocaba, porque en la Legislatura se lo iban a sacar.
Mencionaba también que, el conductor de radio Mario Lozano Carbonell, decia bien que cuando se mofaba de la actitud de las autoridades judiciales veracruzanas en el caso de Morales Aguirre; ¿en verdad, que creen que nadie piensa en este estado?. Dicho columnista ha mencionado valientemente que la actuación de las autoridades judiciales, especialmente de Tomás Cristóbal Cruz, era de lo más sospechosa y que incluso llevo al encubrimiento de los involucrados en el crimen, principalmente de los autores materiales; además de formar parte de la farsa montada por las hermanas Morales Aguirre, por el diputado federal Pablo Pavón Vinales, y el inspector de Policía y guardaespaldas de la familia, el entonces inspector Ronaldo Smith Torres.
Finaliza su columna remarcando que Minatitlán es la tierra de la impunidad, se pregunta ¿puede matar a una persona y con sólo tener fuero nadie es detenido? ¿Dónde ha ocurrido esto en toda la república? Y sentencia que nunca ha sucedido y mucho menos que esté involucrado un líder petrolero ostentándose como diputado federal y un inspector de Policía, ambos cubiertos con el manto protector de un subprocurador de Justicia.
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